Hoy quiero dedicar estas líneas a quien en su deseo de satisfacerme, darme un capricho y ser un refinado galán, acudió a ponerse en mis manos con un obsequio especial.
La envoltura de reconocida perfumería evidenciaba el carácter de su interior, pero no los matices. Sus palabras fueron una leve disculpa por no haber encontrado y podido conseguir para Mi la codiciada Midnight Poison, pero mayor mérito le he de conceder por el esfuerzo y osadía de intentar encontrar un perfume adecuado y que encajara con mis gustos.
Su elección ha sido sublime.
El pasado mes de Julio fue la presentación de un nuevo perfume de la mano de Elie Saab. Nacido en Beirut, Elie Saab es un diseñador artesano y autodidacta, especializado en trajes de noche femeninos; la fuente de inspiración para todo aquello que lleva su nombre, es la mujer.El frasco del perfume tiene una estética correlativa a la moda que caracteriza al diseñador, siendo reflejo de un objeto precioso, elegante y chic, facetado para optimizar la luz y que desprenda brillo como una joya.
El perfume es atemporal, femenino, adictivo pero alejado de la exageración. Esta fragancia ha sido creado por Francis Kurdkjian, perfumista francés-armenio considerado uno de los mejores del mundo, a partir de sensaciones, no de imágenes. Los principales ingredientes del perfume de Elie Saab son un azahar fresco que no empalaga, un toque de jazmín que aporta feminidad, cedro libanés (símbolo de la bandera del Líbano) y un poco de miel de rosa como nota adictiva.
Vanguardia, sensualidad y sofisticación sobre mi piel gracias a este magnífico perfume cautivante y exquisito.
Todo un acierto y un homenaje a la feminidad y el dinamismo.
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