Abierto en el año 1997 en un antiguo burdel de Plaza Pigalle, en el corazón de Montmartre, barrio famoso no sólo por haber sido el lugar predilecto de los poetas malditos e intelectuales del siglo XIX, donde bebían absenta, disfrutaban de los placeres en los innumerables burdeles y por supuesto, creaban y debatían de los temas más interesantes, sino también, hoy día famoso por sus sex-shop y la gran riqueza cultural que se respira en muchos de sus rincones, barrio histórico de la capital francesa.
El museo del erotismo no es un gran museo como los que uno acostumbra a visitar en París, de enormes continentes, llenos de seguridad y de merchandising cultural, más bien es un museo que mantiene el ambiente del antiguo edificio y es parte del barrio. Cuenta con exposiciones permanentes y temporales distribuidas en sus siete plantas. Las permanentes, exponen el tema del erotismo y el sexo de acuerdo a lo sagrado, el arte popular, el arte contemporáneo y el segundo piso dedicado a los burdeles del siglo XIX, nivel que les recomiendo por su interesante colección de fotos, documentos y dibujos de los burdeles parisinos de éste siglo hasta el año 1946, fecha en la que fueron cerrados.
Además de las colecciones permanentes, el museo ha permanecido libre de las presiones sociales y oficiales por decirlo de alguna forma, para presentar el trabajo de más de 150 artistas dedicados a romper con los tabúes y desdramatizar por medio de la creación artística, un tema que muchas veces es causa de vergüenza en occidente, herencia de nuestra religión, que separa el cuerpo del espíritu a diferencia de las religiones primitivas donde existe conexión entre sexo y religión, como es el erotismo.
Más información en http://www.musee-erotisme.com/
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